IO-Link adquiere una gran importancia como protocolo de comunicación para las complejas tareas de medición en la automatización industrial. Ahora, con el VEGAPULS 42 ya existe el sensor de nivel radar perfecto. Cumple de forma rápida, sencilla y económica los elevados requisitos de la industria y completa la familia IO-Link de este especialista en tecnología de medición, que ahora, junto con el VEGAPOINT y el VEGABAR , ya cuenta con una gama completa para el nivel, la detección de nivel y la presión. 

Con sus versátiles adaptadores higiénicos, el VEGAPULS 42 es idóneo para procesos con unos elevados requisitos higiénicos y siempre es la elección correcta en casos de una automatización continua con cambios rápidos de nivel. 

Centrado en lo más esencial
El sensor radar está equipado con todas las funciones necesarias de última generación. Al mismo tiempo, con el VEGAPULS 42, VEGA ha prescindido de todo «lo que lo haría innecesariamente caro y demasiado complejo a nivel técnico», explica el jefe de producto, Marvin Moser. Permite la comunicación con IO-Link, lo que implica una transmisión de datos bidireccional con un diagnóstico y una parametrización muy amplios.

  • Los datos clave de un vistazo
  • El VEGAPULS 42 está diseñado para una distancia de medición media de hasta 15 metros y se puede utilizar en temperaturas de hasta 150 °C. El equipamiento es apto para los ciclos de producción,
  • los procesos de dosificación y
  • los procesos auxiliares, como los sistemas de transporte y de envasado

Es apto para todas las aplicaciones estándar donde más funciones no harían más que complicar el trabajo. 

Mucha experiencia en la automatización industrial
VEGA lleva más de 30 años cosechando éxitos con la tecnología de medición y es líder mundial en el sector del radar. Ahora, con el VEGAPULS 42, la empresa aporta sus numerosos años de experiencia a la automatización industrial. El nuevo sensor se basa en el chip radar de desarrollo propio, que se considera el mejor del mercado gracias a su gran rango dinámico y a su versatilidad.

En las industrias con unos requisitos higiénicos muy exigentes, como la farmacéutica y la alimentaria, el radar es la tecnología de medición más adecuada: el nivel se registra de forma continua y sin contacto, y las condiciones de proceso y ambientales no afectan al sensor. La tecnología de medición más fiable con un bajo coste de adquisición: esto es lo que marca la diferencia en la automatización industrial.