Niveles y presión de agua fiables y siempre bajo control

Las tareas de Veolia son diversas, todas encaminadas al objetivo final: garantizar un suministro seguro de agua potable a casi un millón de habitantes. Inicialmente, está el mantenimiento y la monitorización de los 218 pozos de la ciudad y la región circundante, la profundidad de perforación media es de 374 m y el pozo más hondo tiene una profundidad de 650 metros. El caudal medio por pozo es de 18.62 litros por segundo. Cada uno de estos debe ser monitorizado de forma exhaustiva para garantizar el abastecimiento del vital líquido.

Antes del suministro, el agua potable se mezcla con hipoclorito sódico y se filtra con carbón activo para, posteriormente, pasar a los depósitos altos y cisternas que se encuentran distribuidos por toda la ciudad. “Suministramos agua potable de alta calidad a hogares, hospitales, colegios y comercios a través de una red de tuberías de 2,821 kilómetros de longitud”, afirma Leonardo Estrada García, director general de VEOLIA Aguascalientes, en referencia a la importante tarea de la empresa.

Desde 2020, se encuentran en operación los sensores de VEGA en varios puntos del suministro de agua potable. Algunos de los factores que resultan a partir de su aplicación, son: asegurar la presión en la línea de agua potable al consumidor final, monitorizar el agua en el pozo de bombeo y medir el nivel en los depósitos altos y las cisternas para almacenar el agua.

El reto:

Durante mucho tiempo, la presión del recurso únicamente se monitoreaba de manera manual, con el uso de un manómetro de forma aleatoria. No se contaba con ningún tipo de monitorización remota en tiempo real ni visualización de la presión del agua en el punto de entrega al consumidor final. Esto no solo era un inconveniente para los usuarios, sino que también mantenía plazos de respuesta prolongados cuando surgían problemas, imposibilitando obtener un pronóstico y una intervención oportuna.

Los sensores de VEGA también comprueban los niveles de agua en el pozo de bombeo. Desde estos pozos profundos, el agua subterránea se bombea a la superficie mediante bombas sumergibles. En este proceso debe asegurarse que no se extrae más agua de la que se pueda volver a llenar de forma natural, de modo que es imprescindible disponer de una medición de nivel fiable y sin mantenimiento.

El desafío para los sensores: medir con precisión el nivel del agua dinámico (cuando se mueve el agua porque la bomba está en marcha) y el nivel estático (cuando la bomba está parada). Gracias a su carcasa robusta y a la versión con cable, el transmisor hidrostático VEGAWELL 52 se puede utilizar de diversas formas: su núcleo es la celda de medición cerámica CERTEC®. La presión hidrostática de la columna del líquido provoca un cambio en la capacidad de la celda de medición a través de la membrana de cerámica, este cambio se convierte en una señal normalizada de 4 ... 20 mA. La celda de medición completa consta de cerámica de alta pureza y de excelente estabilidad a largo plazo, se caracteriza por una resistencia a la sobrecarga muy elevada, lo que la hace idónea para su uso en el pozo profundo.

Para VEOLIA Aguascalientes, la instalación de los sensores de VEGA ha contribuido a su misión de digitalizar las operaciones. Ahora no solo tiene una visión general de todos los puntos de medición, sino que también puede adelantarse a los incidentes. Y los consumidores finales también se benefician de un suministro de agua fiable sin caídas de presión.